Qué actividad física deben hacer los niños
La actividad física en los niños, un hábito que se debe motivar desde la infancia como parte de un estilo de vida saludable, es indispensable para un desarrollo integral. Por consiguiente, es importante que lo inculques a temprana edad, con el fin de que haga parte de la rutina diaria de tu hijo a largo plazo.
La actividad física regular, complementaria a una alimentación balanceada, tiene beneficios corporales, cognitivos y emocionales para tu hijo. En este artículo encontrarás consejos para estimular esta práctica, a través de la iniciativa de Nestlé por Niños Saludables, que promueve cinco hábitos de alimentación y vida saludable en los niños.
Según la recomendación de la OMS los niños y jóvenes entre los 5 y los 17 años, deben invertir, como mínimo, sesenta minutos diarios en actividades físicas de intensidad moderada a vigorosa (La actividad física en los jóvenes, 2018).
Por esta razón, tu hijo debe contar con tu apoyo y con las herramientas necesarias que le permitan mantener este hábito a diario.
Beneficios de la actividad física regular para los niños
Según la Academia Estadounidense de Pediatría, dentro de los beneficios que presenta la actividad física para los niños se encuentran los siguientes (Healthychildren.org - Actividad física: mejor salud, 2014):
- - Articulaciones y huesos más fuertes
- - Mayor fortaleza en los músculos
- - Menos grasa corporal y menor riesgo de obesidad infantil
- - Mejor flexibilidad
- - Un sistema cardiovascular más saludable (reduciendo el riesgo de contraer enfermedades cardíacas e hipertensión)
- - Menos probabilidad de sufrir diabetes
- - Más energía
- - Mayor capacidad de manejar el estrés
- - Mejor autoestima y seguridad en sí mismo
- - Mayor aceptación social por parte de sus compañeros activos físicamente
- - Oportunidades de hacer nuevos amigos
- - Mejor concentración en el colegio
Asimismo, según Ana María Bonilla, psicóloga experta en desarrollo motriz y estimulación, “La actividad física es importante, porque además de desarrollar los sistemas cardiovascular, muscular y óseo, estimula el proceso cognitivo, social, y psicológico del niño” (Bonilla, 2020).
A través de un estilo de vida activo, tu pequeño explora y se conoce a sí mismo y al medio que lo rodea, lo que lo ayudará en todos los procesos de adaptación a lo largo de su vida.
Para Bonilla, esta exploración también, enriquece el pensamiento, el nivel de razonamiento crítico, y el lenguaje, de una manera equilibrada (Bonilla, 2020).
Además de los beneficios físicos, psicológicos y cognitivos que representa para la salud, la actividad física le ayuda a tu pequeño en su bienestar emocional. A través del movimiento, preferiblemente al aire libre, baja sus niveles de estrés, distensiona los músculos, duerme mejor y libera endorfina, serotonina, dopamina, y oxitocina, las hormonas responsables de los estados de calma y felicidad.
Cómo estimular la actividad física en los niños
Tu papel es primordial para que tu hijo realice actividades físicas de manera regular. Estas son algunas recomendaciones:
- - Practiquen varios deportes en familia, para que más adelante sea tu hijo quien elija cuál es el que más le gusta. Ten en cuenta que ninguno es mejor que otro, lo importante es que tu pequeño se divierta y sea feliz con su elección, porque así tendrá más posibilidades de continuar con su práctica.
Nunca lo obligues a realizar algún deporte específico, esta es una decisión que deberá tomar por sí mismo, con tu orientación.
- - Es importante que cuando tu hijo realiza alguna actividad física, esta sea supervisada por un entrenador que lo guíe de manera adecuada, según sus capacidades.
- - Cada sesión de actividad física, debe estar precedida de un período de calentamiento y seguida de uno de estiramientos, para que los músculos, las articulaciones y el sistema cardiovascular se adapten de manera gradual y segura.
Cuando tu pequeño realiza un deporte de manera inapropiada, puede afectar su desarrollo, lesionarse y sentir inseguridad para practicarlo de nuevo. Enséñale a escuchar su cuerpo, ninguna actividad debe causar dolor o fatiga extrema.
- - Sé un ejemplo a seguir. Si tu hijo te ve disfrutando un estilo de vida activo, tiene mayores probabilidades de hacer de este hábito una parte fundamental de su rutina diaria.
Cuáles son las actividades físicas recomendadas
- - A los cinco años los niños disfrutan del juego al aire libre y de la exploración en grupo. Es importante que a esta edad tengan espacio para correr, activarse fisiológicamente, oxigenarse e interactuar con sus pares.
Los balones, las cuerdas, los aros, los rodaderos y los pasamanos son algunas herramientas con las que los niños de esta edad pueden empezar esta práctica.
Si no tienes un espacio al aire libre, adáptalo en tu casa y muévanse en familia a través de opciones lúdicas. Pueden hacer una clase de yoga, un concurso de baile o jugar a las escondidas.
Esta es una idea para bailar en familia: Vamos a bailar.
- - A partir de los siete años, cuando ya entienden las reglas y el significado de los límites, los niños pueden practicar deportes y competir en actividades que estimulen la disciplina y el esfuerzo.
- Según Bonilla, “En esta etapa un niño puede elegir qué deporte practicar, ya sea en equipo (fútbol, baloncesto, voleibol) o de manera individual (tenis, gimnasia, ballet, natación), según sus preferencias y sus propias necesidades” (Bonilla, 2020).
En casa también puedes estimular la actividad física: En búsqueda del regalo escondido.
Lee más sobre Nestlé por Niños Saludables , nuestra iniciativa emblemática para ayudar a los padres y cuidadores a promover en las generaciones futuras hábitos de alimentación y vida saludable.